martes, 29 de mayo de 2012

#Yo soy 132

#Yo soy 132 


El miércoles 23 de mayo de 2012 se llevó a cabo una multitudinaria marcha que tenía la cualidad de  reunir a estudiantes universitarios de diversas instituciones. Algo que hay que señalar es que esta marcha fue organizada por estudiantes de la Ibero, una universidad privada; pero el grueso de la manifestación estaba formado por estudiantes de las universidades públicas del país como la UNAM, el Politécnico y la UAM. Si nos ponemos a pensar una pregunta sencilla ¿qué hubiera pasado si se hubiera corrido a Peña Nieto de la UNAM?...



La respuesta debería de contrastarse con el cómo se tomó la noticia sobre Labastida en la Facultad de Economía.
El desencantamiento por la política no es algo nuevo, es algo que afecta en general a la población mexicana.  Esto hace eco en los jóvenes que están saliendo a las calles a demandar que la pluralidad que se ve en estos movimientos, exista también en los medios de comunicación.
La Ibero, que encabezó la marcha del día miércoles, hizo leer un documento con los lineamientos de la marcha, que entre sus puntos más importantes se podía hacer notar dos: que el movimiento permaneciera apartidista y que se exigiera la democratización de los medios. Como demanda inmediata, se exigió que el debate se transmitiera por cadena nacional (para después pedir que se apague la televisión dos días, donde en uno se transmite el debate).
Un dato curioso: Paco Ignacio Taibo II salió de entre las multitudes a arengar a los jóvenes a concientizar su voto, con connotaciones obvias anti-priístas. Se le trató de quitar la palabra (irónico, ya que uno de los puntos a tratar era la no censura); se le dejó hablar y se continuó con el mítin en la Estela de Luz (mejor conocida como “Estafa de luz”, o el más común “La Suavicrema”) que se convirtió en marcha hacia el Ángel, para después dividirse en dos, al Zócalo y a Televisa Chapultepec.

"Entre lo público y lo privado" de Iván Pacheco

Al final de la marcha en Televisa Chapultepec, el movimiento permanecía sin fines en común, las universidades privadas mantenían sus exigencias de democratización de los medios; mientras que entre las públicas prevalecía una fuerte determinación por la no imposición del candidato de las televisoras.

Mi diagnóstico es simple (y aquí mi temor a la malinterpretación), las peticiones del grupo proveniente de las universidades privadas son en su mayoría “pequeño burguesas” (como planteaba Rafael Fonseca, miembro del Círculo). Lo que quiero entender como el enfoque desde el contexto social en el que están inmersos. Rafael comentaba la similitud con lo que sucedió en Monterrey hace algunos meses, donde se asesinaron a estudiantes del Tec de Monterrey y se tradujo en manifestaciones masivas por parte de un frente unido de universidades públicas y privadas; el señalamiento que hacía era que sólo los grupos más radicales de las universidades privadas permanecían en el movimiento, porque la mayoría, al ver que sus peticiones pequeño burguesas no serían resueltas con éste, eligieron abandonarlo.
La democratización de los medios, contra el anti-Peñanietismo. ¿Se convirtió en un problema? Sí, pero no lo suficientemente significativo o grande como para que el movimiento se empezara a deshacer desde adentro. El movimiento permanece apartidista, y a su vez, permanece plural.

El movimiento no tiene una cabeza, tiene 132
Si bien la Ciudad de México parte de un contexto diferente al de Monterrey, el movimiento Yo soy 132 ha encontrado un camino mutuo para todas las universidades. Se  prepara una asamblea general, donde las escuelas organizadas se reunirán para concretar los objetivos por los cuales el movimiento se va a regir. Este movimiento, a diferencia del 68, si bien sigue siendo una búsqueda democrática por mayores libertades para los jóvenes, hoy en día no hay líderes visibles (muy a pesar de las televisoras que han buscado enjaretar esta responsabilidad a algunos jóvenes de la Ibero que terminan deslindándose y haciéndose llamar sólo voceros). 

El movimiento usa a las redes de socialización en línea. Pero sufre de difusión suficiente en los demás grupos sociales. Muchas personas que observaban el grupo de personas que se dirigía a Televisa Chapultepec, no tenían ni una mínima idea de por qué se llevaba a cabo la marcha.
La sociedad mexicana, sobre todo la rural, necesita estar informada de los movimientos. Y es también importante informar porque eventualmente se sumarán muchos movimientos más que han permanecido en el letargo o en la oscuridad mediática. Por lo pronto, considero que el movimiento tiene que desembocar en tener a un observador por casilla del movimiento, haciendo visible su afiliación al YoSoy132, concluyendo la primera fase del movimiento legitimándose ante el IFE.


"El neoliberalismo es pinche, no sirve para desarrollar una nación. Pero el neoliberalismo a la mexicana, es pinchísimo, sirve para destruir una nación." - Paco Ignacio Taibo ll

"Pluralidad y Consenso" de  Jimena Ortega


Sí, es cierto, no queremos un candidato presidencial impuesto por una televisora. Es cierto también que no creemos en los resultados de las encuestas “oficiales” y que no sólo la comunidad estudiantil exige un proceso electoral limpio y que respete la “democracia” del México de hoy.
Estudiantes de la Universidad Iberoamericana fueron el detonante de una serie de movilizaciones, que como inconformidad principal tienen la monopolización de los medios, la falta de transparencia y por supuesto el rechazo al candidato priísta Enrique Peña Nieto. En aquel “viernes negro”, 131 estudiantes nos demostraron que no es necesario un líder, que sí hay un consenso, aunque tal vez un tanto superficial, para mostrar inconformidades.
Caracterizo el consenso de superficial, porque como fue mencionado anteriormente, una vez inmerso en la diversidad del movimiento, los intereses están claramente divididos. Sin embargo, las demandas adquirieron pluralidad a partir del “viernes negro” y lo que se busca ahora es la ampliación del consenso a través de asambleas estudiantiles. La abundancia en la diversidad de ideas, peticiones y exigencias debería de llevarnos a reconocernos en el otro. Es decir, de lo que carezco como individuo, es de lo que carecemos como colectivo. No somos iguales, nuestras demandas y exigencias no son las mismas, nuestras necesidades tampoco lo son. Pero todas ellas, por más diversificadas que sean, provienen de un mismo núcleo, de un sistema caduco e inconsciente, un sistema alejado de nuestras escaseces e insuficiencias.


Se exige “revolución si hay imposición”, pero, ¿de verdad estamos plenamente conscientes de lo que significa revolución? ¿De lo que implica asumir esa gran responsabilidad? ¿Estamos listos para ejercer la carga y compromiso de nuestras consignas? ¿La “revolución” depende enteramente de nosotros? 
Podemos caer en la “antipatía funcional”, en la que ya no importa si estamos de acuerdo o no en lo que se pide en el movimiento, sólo necesitamos un lugar en dónde gritar y hacer ejercicios de catarsis, caer en un enojo e indignación temporal para después regresar cómodamente al punto del que partimos.
Corremos el riesgo de que las consignas del movimiento, a falta de conciencia y reflexión, se tornen vacías y no logren dar un diagnóstico profundo de la realidad que nos aqueja, y que a su vez, en lo que derive dicha falta de capacidad reflexiva, nuestro campo de acción efectivo se reduzca a hechos no lo suficientemente trascendentes como para alcanzar y aprovechar las condiciones de transformación que nos ofrece nuestra realidad.

  
"...la función de la utopía no es alcanzarla, la función de la utopía es estar ahí para que todos los días nos levantemos a buscarla." - Eduardo Galeano.


"El malestar generalizado" de Salvador Patiño


Mientras miles de estudiantes nos manifestábamos afuera de las instalaciones de Televisa, dentro de ella se erigía un acto de réplica que pretendía a toda costa legitimar a Peña Nieto como el próximo presidente de México y a la televisora, como un ente crítico y veraz. 

Quisiera pensar que la mayoría del sector estudiantil parte del #Yosoy132 tiene claro cuál es el lugar histórico que ocupa Televisa respecto al aparato estatal mexicano. Jacobo Zabludovsky, pronunció el 2 de Octubre de 1968 unas de las tantas palabras que evidencian el pacto histórico entre dos grupos de poder; "Hoy fue un día soleado".


 



La capacidad y experiencia del aparato estatal mexicano es suficiente como para diluir expresiones etéreas e incluso encontrar alguna manera de incorporarlas a éste, como a la vieja usanza priísta. Hoy las diferencias entre las universidades han salido a flote, existiendo distintos matices; mientras en algunas facultades de la Universidad Nacional Autónoma de México se parte de la crítica al neoliberalismo, a la "ineficacia representativa" de la partidocracia y su consiguiente sistema electoral, en otras se busca una apertura mediática y que el resto del proceso electoral sea dentro de lo que cabe; limpio.
El día de mañana, miércoles 30 de mayo se efectuará en las "islas" de Ciudad Universitaria una asamblea inter-universitaria en la que se discutirán los objetivos del #Yosoy132, poniendo a prueba la capacidad de llegar a acuerdos entre estudiantes de distintas procedencias.                                                                                                   




Sin duda alguna, existe un malestar generalizado que ha impulsado incluso a los que menos creíamos, en salir a las calles; me parece que a pesar de los matices, el malestar obedece definitivamente a costumbres neoliberales que encuentran su máxima expresión en la imagen de Enrique Peña Nieto. Sin embargo, debemos ser conscientes que gran parte de la población ajena al movimiento es partícipe y reproductora del sistema del que tanto nos quejamos. Es preciso dotar de información al resto de los mexicanos, pues se corre el riesgo de que todo quede, en el peor de los casos, en una moda pasajera.








Mañana será un día trascendente; #Yosoy132 entra a otra faceta, vital para su propia consolidación, #Yosoy132 como movimiento tiene la obligación de conocerse a sí mismo, de saber qué busca del país y por qué, para poder así generar un programa de acciones sincronizadas con objetivos inmediatos, a mediano y largo plazo, sólo espero que las diferencias y la hondura de los poderes fácticos no sean suficientes para apaciguar los ánimos que hoy están encendidos.





“Una modernidad que se ha desprendido de todo modelo, abierta al futuro, deseosa de innovaciones, sólo puede extraer sus criterios de sí misma.” – Jurgen Habermas.






3 comentarios:

  1. Primeramente felicito a todos y cada uno de ustedes por esté espacio. De mi parte tienen el respaldo y apoyo como un hombre, un mexicano, y más allá; el de un hermano. Hay quien se cree con el poder de subordinar, oprimir, obligar, discriminar, despreciar, marginar, intimidar, engañar,insultar, menospreciar, subestimar, olvidar, maltratar y asesinar...., y al mismo tiempo justificarse, enorgullecerse, adinerarse, ensancharse, alegrarse, creerse y perdonarse... hay quien se cree juez , mucho antes de haberse juzgado así mismo. Se debe seguir haciendo consciencia a todos los que integramos este hermoso país. Es respondabilidad y compromiso de todos nosotros como individuos y ciudadanos un verdadero cambio, ya que somos en conjunto la base en donde se posa el poder, que ha dañado tanto a todos nosotros porque el poder corrompe. Y quienes han sido corrompidos, lo han hecho por carecer de integridad, se han convertido de niño a hombre y de hombre en bestia. Para lo único que no debe existir la represión y la imposición es para las causas justas. Justo entre los justos es aplicar la política represionista en contra de la mediocridad, la pobreza, la falta de oportunidades, la mala educación, el subdesarrollo, sin mencionar muchas otras!! Este movimiento es fundamental para un cambio verdadero. Hoy representamos el futuro de esta nación y el futuro que podemos heredar a nuestros hijos y familia. La Ley ha sido superada por la exigencia de causas justas y si la Ley no da justicia, la justicia tendrá que buscarse por otros medio. Por muchos que murieran, no morirían los ideales por los que luchaban. Me sumo enteramente a esta revolución, revolución de consciencia, de valores y de integridad humana y si existe alguién en contra de ello, le digo: Podrás acabar conmigo, pero nunca acabarás con mis ideales. El poder está en nosotros,arriesguemos todo por por nuestro futuro y el de nuestros hijos y familias, por nuestro país y por la humanidad.

    Es mi humilde aportación compartida para todos Uds.

    Mario Peralta Velázquez.

    Felicitaciones amigos por esté gran espacio. Saludos.

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  2. Muchas gracias Mario, este espacio está construyéndose con las ideas de varios. Pero el movimiento está siendo edificado por los reclamos, las vidas y el sentimiento de los jóvenes. Ojalá que el movimiento no se detenga hasta que las exigencias sean cumplidas.

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  3. Antes que nada un cordial saludo para todos los que pertinentemente crearon este blog, muchas felicidades por el entusiasmo, dedicación y ahínco que le están dando a la cobertura del movimiento #YoSoy132. Esto refleja que a fin vencimos el miedo que nos tenía atados durante décadas, expresarse, más que un privilegio, es una necesidad innata del ser humano. En particular me llamó mucho la atención desde que escuché del "Viernes Negro" en la Ibero, los 131 alumnos legítimos del instituto que manifestaron su inconformidad con lo que representa la figura del candidato del "Nuevo PRI", muchos temas me vienen a la cabeza, están zumbando como abejas aturdidas e inquietas, ya lo creo; viene el día del sufragio mexicano, el Primero de Julio de 2012, no es una fecha que debe pasarse por alto, al menos en mi situación es la primera vez que voto para elegir presidente de la Nación, ya lo hice el año pasado para elegir gobernador de mi entidad federativa, estamos ante una situación de suma importancia para el presente y sobre todo para el futuro de nuestro país; las exigencias del movimiento me parecen bastante sensatas y coherentes dentro de lo que cabe, me llama la atención que se hayan unido universidades públicas y particulares bajo una misma bandera: exigir justicia, transparencia, confiabilidad, lealtad, un sinfín de cosas que no está de más exigir,son las necesidades del país; espero que este movimiento perdure antes, durante y después de las elecciones hasta que todas nuestras demandas se cumplan, que no se queden como una simple moda, que trasciendan. Por otro lado, aunque a veces las demandas de las universidades privadas no coincidan del todo con las demandas de las públicas, se debe aprovechar que "algo" nos tiene aquí unidos, la necesidad de un cambio de hecho en nuestro México, y claro, demostrar que las décadas de letargo, somnolencia y apatía han terminado. Mucha suerte en su enmienda, son personas que este país necesita, también me incluyo, ¡SOMOS!. La llama está encendida, que el terrorismo mediático y la opulencia de la mente no los apaguen.

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